La pérdida de peso nunca es fácil, y esto es especialmente cierto una vez que has entrado o pasado, la edad de cuarenta años. A esta edad, el metabolismo empieza a disminuir, los compromisos de la vida permiten menos tiempo para hacer ejercicio y las articulaciones y los músculos pueden comenzar a prohibir algunas de estas actividades.
Si bien los desafíos son muy realistas, existen algunos pasos que puedes seguir para aumentar tus esfuerzos de perder peso y sentirte mejor.
La pérdida de peso después de los 40…Uno de los más simples hechos acerca de la pérdida de peso es que no se puede perder peso sin eliminar más calorías de las que consumes. Para entender completamente la cantidad de calorías que estás consumiendo en comparación con la cantidad de calorías que estás utilizando en un día, puede ser útil llevar contigo un diario pérdida de peso.
Anota las comidas y ejercicio, utiliza un contador de calorías en internet para que entiendas la diferencia entre lo que estás consumiendo y lo que estás eliminando. Una vez que tengas una idea exacta de estos números, puedes comenzar a hacer cambios que aumenten tus esfuerzos de pérdida de peso.
Sabiendo que las calorías tienen un impacto significativo en tus esfuerzos para perder peso, elegir los alimentos correctos pueden ser igualmente de importantes. Los alimentos ricos en fibra, como los cereales integrales, frutas y verduras ayudan a llenarte con menos calorías, y te sientes satisfecho por más tiempo que si comieras los alimentos procesados, grasos y bocadillos llenos de azúcar.
Una gran forma de aumentar la cantidad de salud de tus platos de comida es asegurarte de que la que sirves en el plato sea muy colorido. También esfuerzate por tener un porcentaje mayor de frutas y verduras en tu plato, para llenar el resto con las carnes y almidones.
Ahora que hemos hablado de los alimentos, vamos a tomarnos un minuto para hablar sobre el ejercicio. Tienes que mover tu cuerpo si quieres bajar de peso. Realmente es tan simple como eso. Si no has estado haciendo ejercicio, trata de hacerlo en cinco o diez minutos de intervalo por lo menos cinco veces a la semana.
Más tarde, puedes aumentar esta cantidad a treinta minutos, cinco o seis veces a la semana. El ejercicio que hagas puede incluir cualquier movimiento, algun deporte, pasear al perro, jugar con los niños o nietos en el parque, clases de ejercicios formales, o incluso limpiando la casa. No es necesario ir al gimnasio a menos que lo desees.
Sin duda los alimentos y el ejercicio son aspectos valiosos de un plan de pérdida de peso, pero hacer frente a cualquier clase de cargas emocionales puede ser igualmente importante. A veces reducir tu ingesta calórica y aumentar el ejercicio parece imposible si lo que deseas es comer por razones emocionales.
La pérdida de peso después de los 40 puede ser dificil si tenemos cargas emocionales
Estas razones pueden ser el estrés, la depresión o el aburrimiento. Si te das cuenta que estás comiendo por razones emocionales, busca la ayuda de un grupo de profesionales o de apoyo. Tener una vía para hablar de tus emociones y comprender tus hábitos alimenticios puede aumentar tus esfuerzos de pérdida de peso, y puede mejorar tu salud física y mental también.
Tomar el control de tu peso a cualquier edad siempre es un reto, y esto se vuelve aún más real, una vez que pasamos los cuarenta años. Toma el control de los desafíos que enfrentarás más allá de esta edad, y vas a ganar la batalla. Este sera un logro significativo tanto para tu salud física y mental, por lo mismo vale la pena tomarlo en serio.
Si bien los desafíos son muy realistas, existen algunos pasos que puedes seguir para aumentar tus esfuerzos de perder peso y sentirte mejor.
La pérdida de peso después de los 40…Uno de los más simples hechos acerca de la pérdida de peso es que no se puede perder peso sin eliminar más calorías de las que consumes. Para entender completamente la cantidad de calorías que estás consumiendo en comparación con la cantidad de calorías que estás utilizando en un día, puede ser útil llevar contigo un diario pérdida de peso.
Anota las comidas y ejercicio, utiliza un contador de calorías en internet para que entiendas la diferencia entre lo que estás consumiendo y lo que estás eliminando. Una vez que tengas una idea exacta de estos números, puedes comenzar a hacer cambios que aumenten tus esfuerzos de pérdida de peso.
Sabiendo que las calorías tienen un impacto significativo en tus esfuerzos para perder peso, elegir los alimentos correctos pueden ser igualmente de importantes. Los alimentos ricos en fibra, como los cereales integrales, frutas y verduras ayudan a llenarte con menos calorías, y te sientes satisfecho por más tiempo que si comieras los alimentos procesados, grasos y bocadillos llenos de azúcar.
Una gran forma de aumentar la cantidad de salud de tus platos de comida es asegurarte de que la que sirves en el plato sea muy colorido. También esfuerzate por tener un porcentaje mayor de frutas y verduras en tu plato, para llenar el resto con las carnes y almidones.
Ahora que hemos hablado de los alimentos, vamos a tomarnos un minuto para hablar sobre el ejercicio. Tienes que mover tu cuerpo si quieres bajar de peso. Realmente es tan simple como eso. Si no has estado haciendo ejercicio, trata de hacerlo en cinco o diez minutos de intervalo por lo menos cinco veces a la semana.
Más tarde, puedes aumentar esta cantidad a treinta minutos, cinco o seis veces a la semana. El ejercicio que hagas puede incluir cualquier movimiento, algun deporte, pasear al perro, jugar con los niños o nietos en el parque, clases de ejercicios formales, o incluso limpiando la casa. No es necesario ir al gimnasio a menos que lo desees.
Sin duda los alimentos y el ejercicio son aspectos valiosos de un plan de pérdida de peso, pero hacer frente a cualquier clase de cargas emocionales puede ser igualmente importante. A veces reducir tu ingesta calórica y aumentar el ejercicio parece imposible si lo que deseas es comer por razones emocionales.
La pérdida de peso después de los 40 puede ser dificil si tenemos cargas emocionales
Estas razones pueden ser el estrés, la depresión o el aburrimiento. Si te das cuenta que estás comiendo por razones emocionales, busca la ayuda de un grupo de profesionales o de apoyo. Tener una vía para hablar de tus emociones y comprender tus hábitos alimenticios puede aumentar tus esfuerzos de pérdida de peso, y puede mejorar tu salud física y mental también.
Tomar el control de tu peso a cualquier edad siempre es un reto, y esto se vuelve aún más real, una vez que pasamos los cuarenta años. Toma el control de los desafíos que enfrentarás más allá de esta edad, y vas a ganar la batalla. Este sera un logro significativo tanto para tu salud física y mental, por lo mismo vale la pena tomarlo en serio.
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